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lunes, 28 de junio de 2021

CARTA ABIERTA A LA IGLESIA DE VILLA GRECIA Y A TODA LA HERMANDAD

 

POR: CHEYCO CENTENO

            El sábado 26 de junio de 2021 se llevó a cabo la junta administrativa de la iglesia de Villa Grecia en Panamá, con el firme propósito de disciplinar a la hermana Iris Elena Araúz, y abordar otros temas que simplemente eran secundarios en una agenda organizada con premeditación y alevosía, por parte del presidente de la Asociación Metropolitana como emisario de los dirigentes máximos de la Unión, constituyéndose este acto en otro rotundo fracaso. Esto frustró por segunda vez las intenciones de la organización por excluirnos de la Iglesia, más allá de todo esto, la reunión terminó con una contundente amenaza de parte del pastor Eluvinio Castrellón hacia la iglesia de Villa Grecia en su impotencia por no haber podido lograr su cometido.

            En primer lugar quiero pedir a los apreciados hermanos de Villa Grecia una disculpa por el bochornoso espectáculo que se dio, por la falta de hidalguía de parte del presidente al no querer reconocer la montaña de errores que ha cometido, y que lo ha hecho ver como un amateur en el manejo de los procedimientos eclesiásticos; y que al final viene siendo una total manipulación de las normas.

            Desde un principio le dije a la hermana Iris; cuando sabes que tienes la razón, no debes temer porque Dios está contigo. Oramos antes de salir para la iglesia y pedimos nuevamente al Señor que no permitiera que quienes desean nuestro mal, pudieran disciplinar o expulsar a la hermana Iris de la iglesia; y Dios contestó nuestras oraciones. No voy a contar una larga historia para decirles que Dios intervino en el corazón de los hermanos que ahora saben que, nuestro código de conducta debe ser la palabra de Dios por encima de todo.

            Después de todas las violaciones del pastor Eluvinio al manual iglesia, nuevamente recurre al mismo para buscar estatutos que le favorezcan en su propósito. Interpretándolo todo a su manera, obligó a la hermana Iris a permanecer fuera de la iglesia durante hora y media, para poder preparar el terreno para acondicionar la mente de los hermanos, usando una clausula con malas intenciones, en la cual dice: “ningún miembro sometido a censura, puede participar de una reunión administrativa y tener voz y voto”. Entiendo que el pastor tenga problemas con la semántica interpretativa de las expresiones lingüísticas; esta cláusula se refiere a miembros ya censurados, porque una censura es una disciplina o probablemente la expulsión si así se requiere, pero a pesar de su abuso, nos sometimos a la autoridad y nos permitimos pasar por alto esta ignorancia, porque claramente sabemos que la hermana Iris estaba en un proceso, en el cual no había sido ni censurada y tampoco pudieron censurarla. Comenzando por allí, le sugiero a la organización que realice un seminario para que los ministros puedan entender las expresiones lingüísticas, e interpretar en su justa dimensión los aspectos normativos del manual.

            Por otro lado fuera del ejercicio de la norma, Eluvinio Castrellón convocó a la junta directiva de la iglesia sin el debido protocolo y en ausencia de la imputada que era la hermana Iris. Se entregaron las notificaciones extemporáneamente y abusando de su poder, inventó normativas para limitar nuestra participación con el fin de adormecer la conciencia de los hermanos. La forma prepotente, déspota y autoritaria en la que se comportó, denotó su falta de pericia, a pesar de tantos años de ser un ministro. Nos trató como si no valiéramos nada, aún a pesar del respeto que la hermana Iris le demostró, el asumió una actitud seria e implacable.

            Ellos necesitan detener algo que se les ha salido de control, no es un movimiento disidente; al llevarnos ante las juntas administrativas, lo que están haciendo ellos es fomentando la división y no se dan cuenta que están perdiendo credibilidad. El Deseado de todas las gentes dice en el capítulo #1 pág. 13: “El ejercicio de la fuerza es contrario a los principios del gobierno de Dios; el desea tan sólo el servicio de amor; y el amor no puede ser exigido; no puede ser obtenido por la fuerza o la autoridad”, y lo que menos ellos demuestran es amor por la hermandad.

            La hermandad no tuvo que entrar en polémicas para entender la tiranía, a través del mensaje amenazante de un líder que quiso intimidar a toda una iglesia para demostrar el poder y el control que ellos tienen. Le envío un mensaje claro al pastor Eluvinio; la iglesia de Villa Grecia no tiene por qué pagar los platos rotos de las irresponsabilidades de ustedes, si usted no sabe responder a las interrogantes de los hermanos, no inicien procesos en los cuales ya saben que lo que la hermandad desea es que expliquen sus movimientos administrativos con lujo de detalles, probablemente en otros países han aceptado la censura a toda una iglesia y con justa razón si es que cometieron un error, pero le advertimos que no aceptaremos una censura contra la iglesia de Villa Grecia solamente por estar en desacuerdo con ustedes. Aún es más, si la junta de la Asociación procede contra la iglesia de Villa Grecia de manera irracional, atraerán mayores problemas para ustedes, porque no nos quedaremos de brazos cruzados ante una nueva injusticia, piensen bien en lo que hacen.

            Al igual que en el tiempo de Jesús en el cual los fariseos no se atrevían a actuar solos ante cualquier seguidor del cristianismo. El pastor Eluvinio llegó acompañado por dos pastores más y el pastor de la iglesia. Entre los cuatro trataron de desvirtuar los argumentos de la hermana Iris ante mi ausencia, porque no me permitieron entrar. Hicieron tiempo para que yo no participara, y en efecto cuando lo hice, el presidente se incomodó y se molestó porque le recordé que él había dicho en una reunión de ancianos en el año 2019, que nosotros éramos miembros desfraternizados que queríamos hacerle daño a la iglesia. Al verse atrapado en su gran mentira, intervino autoritariamente para descontinuar mi participación y exigirme que saliera de la iglesia en un bochornoso espectáculo en el cuál hubo intercambio de palabras, y salí de la iglesia por respeto a los hermanos que me pidieron que lo hiciera, entendiendo que ellos ya habían comprendido lo que pasaba en ese lugar, abuso de autoridad y extralimitación de funciones. Es por los hermanos que tienen un criterio propio e individual para pensar, que reitero mis disculpas, porque no hizo falta que yo hablara más para que ellos entendieran que estamos viviendo en la iglesia, una dictadura eclesiástica con mercenarios pagados por el régimen, y que deben ir a los diferentes lugares para sofocar los levantamientos que ellos mismos han provocado, por la incapacidad que tienen para explicar todo lo que la iglesia necesita saber.

            En el capítulo 9 de Juan, hay una historia interesante al respecto de un ciego que fue sanado por Jesús en sábado, y que luego fue llevado a la sinagoga ante los fariseos para ser interpelado. Los fariseos le preguntaron cómo Cristo lo había sanado, y si era cierto que él era ciego de nacimiento; quisieron distorsionar la verdad que tenían ante sus ojos y volvieron a preguntarle lo mismo, a lo que el ciego respondió: Ya os lo he dicho antes y no habéis querido oír; ¿Por qué lo queréis oír otra vez? ¿Queréis también vosotros haceros sus discípulos? Y lo injuriaron y le dijeron: Tú eres su discípulo; pero nosotros, discípulos de Moisés somos.

            Esta referencia bíblica indica como los líderes judíos habían abandonado la ley de Dios para darle preeminencia a la ley de Moisés. Los escribas y fariseos habían añadido enmiendas que agravaban y pesaban sobre todo el pueblo judío, dándoles poder absoluto y persiguiendo a todos aquellos que disintieran contra ellos. Por esta razón Cristo tenía que venir nuevamente y extender un nuevo pacto basado en la ley de Dios, y Colosenses 2:14 dice que él clavó en la cruz todas las actas y los decretos que le eran contrarias a los judíos y que los condenaban continuamente. Esto es lo que me convence que Cristo está a las puertas; hoy en día nos está pasando lo mismo. Los pastores, igual que los fariseos de antaño han abandonado las sagradas escrituras que son el verdadero código de conducta para el cristiano, y así establecer sus manuales de iglesia y sus reglamentos operativos, que son contrarios a los principios de la palabra de Dios para imponer sus reglas y establecer un control sobre toda la hermandad. A ellos no les conviene usar la biblia para señalarnos, porque todo apunta a que sus malas prácticas están condenadas por ella, como por ejemplo; usted nunca encontrará en las sagradas escrituras que Dios diga: “préstenle dinero a los hermanos y cóbrenles intereses”, y ellos saben que Dios siempre condenó este asunto entre su pueblo. De hecho hay versículos en los cuales señala que aquellos que prestan cobrando interés a sus hermanos son dignos de muerte, es decir cuelan la paja, y se tragan el camello. Les invito a que busquen en sus biblias Ezequiel 18:13, pero especialmente Ezequiel 22:12 que dice: Precio recibieron en ti para derramar sangre; interés y usura tomaste, y a tus prójimos defraudaste con violencia; te olvidaste de mi, dice Jehová el Señor.

            Voy a parafrasear el versículo anterior: la primera frase indica que las personas que se sienten acorraladas por una situación, pueden pagar a otros para hacerle daño a quienes los acorralan; la segunda es clara, Dios dice que a través de la usura y el interés defraudamos a nuestros prójimos. El cobro de intereses es una práctica popular mundana, y se constituye en un fraude que lleva a quienes lo practican, hasta el punto de usar la violencia o la fuerza para ocultar sus beneficios a través de la coerción como lo han estado haciendo con nosotros para acallar nuestras voces. La tercera frase dice: “te olvidaste de mí, dice Jehová el Señor”. Está claro que cualquiera que practica la usura y el cobro de intereses, se olvida del Señor, porque en ninguna parte de la biblia Dios autoriza tal práctica, y nuestros líderes han puesto sus intereses sobre las premisas de Dios. Qué más podemos decir si todo está claro. Lo que estamos viviendo en Panamá es algo tan inexplicable, que ni el propio pastor Eluvinio supo que responder, cuando se le preguntó en la reunión administrativa, si la organización prestaba o no dinero, a lo que titubeó al no dar una respuesta directa y concreta al respecto. Ellos saben perfectamente que de dar una respuesta positiva, estaría llevándolos al ojo del huracán, sobre todo si tienen que explicar por qué cobran intereses, lo que evidentemente acarrearía una montaña de preguntas que no podrían detener. Pero si la respuesta es no, simplemente deberían explicar por qué en los informes financieros y en los informes de cuadrienal, aparecen tantos préstamos, lo que nos llevaría a preguntar también de dónde proviene el dinero y hacia dónde va, respuestas que brindado incoherentemente en distintas ocasiones.

            Apartaron el verdadero código de conducta que es la palabra de Dios, la echaron a la basura, y lo que para ellos vale ahora, son los estatutos y los manuales que han desarrollado; además, igual que los fariseos que pusieron a Moisés como su maestro, han tomado a la sierva del Señor para justificar sus acciones para que nadie ose llamarles la atención. Cristo viene pronto, porque en la misma circunstancia que se dio en el tiempo de Jesús, nos encontramos ahora. Los manuales y los reglamentos no son malos si se honran justamente, pero cuando se usan como un escudo para escapar de su propia condenación, no hacen más que decirnos que no sirven para nada.

            Podría mencionarles varias cláusulas del manual de iglesia que los condenan directamente a ellos como dirigentes, pero ante ellas se hacen de la vista gorda como los fariseos, estos manuales fueron creados directamente proporcionales a las violaciones de los hermanos comunes y corrientes, y no aplican para ellos, como por ejemplo el motivo de disciplina número 8 que indica “El fraude, o faltar voluntariamente a la verdad en los negocios” asunto del que no quieren saber.

            En la medida en que ellos no admitan sus errores, aumentarán sus problemas, los hermanos no son tontos, ya han entendido que el derecho objetivo que rige para la iglesia, solo es una muralla de defensa para los líderes que se prestan para hacer cosas incorrectas y vivir amparados por la impunidad, pero el derecho subjetivo nos da la facultad como hermanos a exigir que se cumplan las normas, pero las principales normas que hay que exigir que se cumplan, se encuentran fundamentadas en la palabra de Dios. No engañen más a la hermanada diciendo que pastores ungidos y dirigidos por el Espíritu Santo publicaron autorizaciones para prestar dinero y cobrar intereses, porque la palabra de Dios dice todo lo contrario y está práctica va directamente en contraposición de la voluntad de Dios y está trayendo maldición sobre la iglesia.

            El escenario vivido en la iglesia de Villa Grecia, en un espectáculo lleno de violaciones dirigido y orquestado por el pastor Eluvinio Castrellón y acompañado por el secretario de la Asociación pastor Ebeth González, además de alguien que ni siquiera debía estar allí, el pastor Javier Espinoza, junto al pastor Pablo Martínez; solo nos indicó que el presidente necesitaba sentirse emocionalmente respaldado para confrontar a una débil mujer con el carácter suficiente, como para que ellos salieran avergonzados de la iglesia, habiendo pisoteado las normas que tanto ellos exigen del manual de la iglesia. Cuatro contra una, un escenario desigual y vergonzoso, parecía una especie de areópago o tribunal, erigido para sofocar la disensión que según ellos está destruyendo a la iglesia. En todas las épocas cuando el hombre se ha olvidado de las indicaciones y las reglas que Dios le ha dado, el Señor pone fin con acciones misteriosas a las pretensiones humanas que priman sobre los fundamentos divinos. La biblia sola es el código de conducta de los verdaderos cristianos, el Espíritu de Profecía es la luz menor, nuestras decisiones definitivas deben ser tomadas a la luz de la palabra de Dios, sin olvidarnos que la misma sierva del Señor lo dijo en repetidas ocasiones, nosotros podemos aconsejar por medio del Espíritu de Profecía, pero quien tiene la última palabra es Dios.       

            Todo pastor que ama verdaderamente la obra de Dios debe cuidarse de no ser un escriba o fariseo moderno, porque en esta experiencia experimentamos que ellos defienden el sistema, no el evangelio. La señal más poderosa para mí, de que Cristo viene pronto es, la apatía ministerial por defender la verdad, y llamar al pecado por su nombre.

            Termino diciendo a los hermanos que; la Iglesia necesita de hombres que no se vendan ni se compren, hombres que sean sinceros y honrados en lo más íntimo de sus almas; hombres que no teman dar al pecado el nombre que le corresponde; hombres cuya conciencia sea tan leal al deber como la brújula al polo; hombres que se mantengan de parte de la justicia aunque se desplomen los cielos.

            Quiero añadir algo más. Después de haber pasado por esta experiencia tan deplorable, y haber visto el semblante desfigurado por la frustración y la impotencia del pastor Eluvinio, sin olvidar también su actitud inquisidora, advertimos a toda la hermandad que cualquier daño físico intencional que pueda suceder con la hermana Iris Araúz, el hermano Javier González, o mi persona Cheyco Centeno, haremos responsables a los dirigentes de la organización en Panamá, pidiéndoles que recuerden Ezequiel 22:12. Bendiciones para todos.

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